Cortísima.
Mi experiencia es cortísima.
Estoy empezando en esto.
Pero como verás si te metes, se aprende rápido.
Sobre todo, se aprende muy rápido la cantidad de cosas que puedes hacer mal, que pueden salir mal, que puedes perder, romper, estropear...
Muy rápidamente sabrás si esto te engancha o si esto no es lo tuyo, porque tu paciencia y tus límites van a ser puestos a prueba desde el minuto uno.
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Realmente hay que estar un poco loco o loca para meterse en este lío sin más ayuda que unos libros, por buenos que sean. Si hubiese a mano un curso de relojería, me apuntaría sin dudar. Pero no hay, al menos en mi caso, así que toca hacerlo solo.
En la sección "Libros técnicos" indico lo que hay sobre este tema. Lee con detenimiento el libro de
Wiles y el documento "Cómo desmontar un ZHS".
Creo que con esas dos ayudas es realmente posible iniciarse en solitario en la mecánica de relojes de una manera relativamente segura. Léelos ANTES de empezar a desmontar un reloj.
Y cuando tengas ya tu reloj para empezar a desmontar, ten delante esos dos textos, y... a por ello.
A partir de ahí, nadie te va a yudar.
Bienvenido a la aventura.
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Te recomiendo que veas videos de youtube en los que desmontan y montan relojes. Aprenderás mucho, verás cómo sujetan el reloj, las herramientas, los gestos..., aunque sean relojes diferentes del tuyo.
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Mi corta experiencia ya me ha enseñado unas cuantas cosas.
Los libros en general están escritos para aprender el oficio de manera profesional, y por ello son muy estrictos ("coge todo con pinzas", "no toques el mecanismo con los dedos", etc.). Aunque creo que, efectivamente, hay que ir en esa dirección, de momento yo voy más relajado, bastantes problemas tengo...
No estoy arreglando el reloj de un cliente. No estoy haciendo un servicio fino de limpieza y engrase. Estoy enfrentándome a mi primer reloj, estoy cayendo en pánico porque sí, sí, a pesar de las advertencias y a pesar de mi atención, sí, el tornillito saltó desde la punta de las pinzas, voló, se fué... Y ya le he hecho varios rayones al mecanismo porque el destornillador se me sale de la cabeza del tornillo. Y no entiendo cómo todavía funciona el volante después del golpazo que le he dado. y..., etc.
Sugerencia. No te empeñes en desmontar y montar un reloj de un tirón. Eso es demasiado para un principiante. Son muchas operaciones progresivas y cada una de ellas es delicada, así que no te sientas obligado. Desmonta hasta un punto, para, y vuelve a montar. Si lo haces así, y cada vez avanzas un poco más, cogerás habilidad y confianza.
El reloj lo vas a estropear, seguro. Acéptalo y relájate.
A andar en bicicleta se aprende practicando, no leyendo libros. Y esto, lo mismo. Hay que practicar, hay que aprender amargamente lo fácil que un tornillo sale disparado de la punta de las pinzas, lo fácil que el destornillador se resbala de la cabeza del tornillo y hace un rayajo horrible o algo peor, lo difícil que resulta meter en su sitio un simple tornillo, y no digamos ya bajar un puente para hacer coincidir las puntas de los pivotes con los rubíes del puente.
Hay que practicar y eso al principio sólo puede significar desastres. Es inevitable. Pero cuantas más horas metes, más te familiarizas con las piezas, más habilidad coges con las pinzas, con todo.
La paciencia se aprende.
Esto, o te lo tomas en plan Zen, o no funciona.
Suerte.
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SOBRE DESTORNILLADORES.
Además de lo dicho en "Herramientas", te cuento aquí alguna cosa más.
Me he llevado una mala sorpresa. Estoy estrenando un juego de 7 destornilladores . He cogido el más fino (0,6 mm) para soltar el puente del áncora, y no he podido porque el filo de la punta es demasiado grueso, así que me he puesto a afilarlo contra una piedra de afilar. y cuando estaba con el vaivén... Plac... La punta de acero se ha roto por la mitad. No me lo esperaba. Daba por hecho que las puntas son de acero endurecido (que es duro, pero frágil), pero no me imaginaba que se fuera a romper. Ahora ya sé que hay ese riesgo, que creo que es especialmente real en las puntas más finas (no creo que me pase eso con las de más grosor).
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SOBRE PINZAS.
Por mi experiencia, creo que las pinzas deben tener una cualidad: cuando las cierras sin hacer fuerza, ambas puntas deben contarcar a lo largo de 4 ó 5 mm. Si las abres un poquito, los extremos de las puntas deben verse paralelos, el hueco entre las puntas debe ser una linea fina.
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UNA SUGERENCIA. Perder un tornillo porque sale disparado de las pinzas y desaparece es tan habitual que practicar y dominar el arte de coger y sujetar correctamente los tornillos con las pinzas debería ser la primera lección del taller de relojería. Coger los tornillos con las pinzas con demasiada fuerza es tan peligroso como cogerlos demasiado flojito. Hay un término medio correcto. Además, no se coge el tornillo por cualquier parte, se coge por "el cuello", justo por debajo de la cabeza. Practica.
OTRA. Cuando cojas un tornillo (o un puente o lo que sea, pero especialmente un tornillo, que es el que más riesgo tiene de saltar y desaparecer) para dejarlo a un lado en una cajita, ANTES de mover la mano con las pinzas MIRA el recorrido que vas a hacer y LUEGO mueve la mano con las pinzas y el tornillo. Si no lo haces así, te ocurrirá que, inexplicablemente, en ese pequeño trayecto había "nosequé" y tu mano o tu codo chocaron y... el tornillito voló... No sé los expertos profesionales, pero yo cuando estoy mirando con la lupa no tengo visión del conjunto, de lo que hay alrededor, y eso hace que al mover la mano o el brazo pueda golpear o tirar cualquier cosa que haya en la mesa...
OTRA: Pon una tela sobre la mesa de trabajo, preferentemente amplia y blanda, y encima pones todo, herramientas, etc. Así, si algo sale despedido, irá a la tela y, con un poco de suerte se quedará ahí. Me gusta la indicación de Wiles de que, puntualmente, cuando tengas que soltar algo que tenga muelle, lo hagas dentro de una bolsa de plástico transparente: eso complica la visión, ciertamente, pero atrapará cualquier cosa que salga despedida.
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Si se me ocurre alguna cosa más, la iré escribiendo aquí.
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